Hoy os vamos a hablar de uno de nuestros museos favoritos de Madrid: El Museo Sorolla. Situado en pleno barrio de Chamberí, en la calle del General Martínez Campos, numero 37, la que fuera casa y estudio del pintor en los últimos años de su vida recoge la mejor colección de cuadros de Sorolla y es un lugar perfecto para visitar en familia.
Os contamos todo sobre este fascinante museo, para que podáis organizar vuestra visita. ¡Tomad nota!
Un lugar para vivir y trabajar
Desde sus primeras estancias en Madrid en la década de 1880 hasta la construcción de su casa en 1911, Joaquín Sorolla tuvo diversos estudios y domicilios en distintos lugares de la ciudad y, poco a poco, se fue formando una idea muy clara de lo que quería para vivir y trabajar.
Una de sus principales aspiraciones era la de unir la zona de trabajo con la zona de vivienda para poder estar cerca de su familia en todo momento, y también tener un jardín privado.
En 1905, ante el buen rumbo que tomaba su situación económica, el pintor adquirió un primer solar en el Paseo del Obelisco (hoy General Martínez Campos), terreno que se corresponderá con la zona de la vivienda y el estudio.
Cuatro años más tarde, y tras el éxito de sus exposiciones en Estados Unidos, encargó el proyecto al arquitecto Enrique María de Repullés y Vargas y, poco después, tuvo ocasión de comprar un segundo solar contiguo que le permitiría ampliar la zona de trabajo e incorporar los tres jardines de la vivienda.
El resultado de este proyecto totalmente personal, como demuestra la extraordinaria colección de dibujos realizados por el propio pintor que se custodian en el museo, es espectacular.
La Casa
La casa cuenta con dos plantas, la primera de las cuales tiene una zona de trabajo formada por tres estudios contiguos de techos altos y abundante iluminación, tanto lateral como cenital, con acceso propio desde el fondo del jardín, y la zona doméstica más pública: salón y comedor, con entrada desde el primer jardín, a través del pórtico principal.
En la planta primera se encontraban los dormitorios de la familia, y en la segunda los dormitorios del servicio. La planta semisótano, ventilada por un ‘patio andaluz’, contenía la cocina y otras dependencias, y la vivienda de los guardeses. La casa tenía luz eléctrica y calefacción central.
El jardín fue otra creación de Sorolla, que diseñó su trazado y escogió sus especies, y que hizo de él uno de los temas favoritos de su pintura en sus últimos años. Es un bello oasis de paz y tranquilidad y son muchas las personas que se acercan a este lugar para desconectar, aunque solo sea un rato, de la vorágine de la vida en la ciudad.
Una colección única
El edificio fue cedido por la viuda de Sorolla, Clotilde García del Castillo, quién en su testamento legó al Estado español la casa y las colecciones que le pertenecían para que se creara un museo en memoria de su marido. El legado fue aceptado en el año 1931, mediante una Real Orden que clasificó la institución que se creaba como “Fundación benéfico-docente de carácter particular”.
El Museo fue inaugurado en el año 1932 aunque, debido a la Guerra Civil, tuvo que cerrar sus puertas siendo reabierto en 1941. Actualmente, conserva el ambiente original de la vivienda y taller del pintor y custodia la más rica colección de sus obras, siendo además una de las casas de artista más completas y mejor conservadas de Europa.
En él, se concentra la mayoría de los objetos que Sorolla reunió en vida. Predomina la obra del artista, pintura y dibujo, que es la colección más amplia y representativa que se conserva y que proviene de las donaciones que su mujer y sus hijos donaron y que se acrecentó en 1951, con la entrega de todos sus bienes por parte del hijo varón de Sorolla, Joaquín Sorolla García.
Ademas, desde el año 1982 ha sido incrementada con adquisiciones efectuadas por el Estado Español para completar la colección.
En el museo también podéis ver muchos objetos que Sorolla reunió y que son el antecedente de las otras colecciones que contiene. Destacan las de escultura, cerámica, joyería popular, fotografía antigua y un importante archivo de la correspondencia que el pintor recibió en vida.
Talleres para niños y visitas
El museo cuenta con una colección permanente y también organiza exposiciones temporales. Además, a lo largo de todo el año programa varios talleres para niños, una actividad que tiene como objetivo que los más peques de la casa conozcan la vida y la obra del pintor mientras pasan un rato divertido. Todos son gratuitos, aunque es necesario inscribirse previamente y tienen un aforo limitado.
También podéis visitarlo por vuestra cuenta, siendo el precio de la entrada de tres euros. Los niños entran de forma gratuita y, además, la entrada también es gratis si vais a visitarlo un sábado, a partir de las 14.00 horas, o un domingo.
De todas formas, os dejamos el enlace a la página del museo, donde podréis encontrar más información útil. Es http://www.mecd.gob.es/msorolla/inicio.html
Si vais a visitarlo, ¡esperamos que os guste y que nos contéis vuestra experiencia!
3 comentarios sobre “¡Hoy visitamos el Museo Sorolla!”