Con miles de lectores a sus espaldas, su colección ‘Princesas Dragón’ (Editorial SM), una saga que rompe con los clichés de los cuentos tradicionales, le ha convertido en uno de los referentes de la literatura infantil española. Estamos hablando del escritor Pedro Mañas, con el que hemos charlado de muchísimas cosas. ¡No os perdáis detalle de la entrevista!
¿Cuándo te diste cuenta de que lo tuyo era ser escritor?
En realidad lo mío ocurrió casi por casualidad. De pequeño yo ya era un niño “al que le tiraba el arte”, como solían decir mis padres. Me gustaba escribir, pintar, actuar, hacer cómics y manualidades… Como siempre digo en los encuentros con lectores, es cuando uno explora y persevera un poco en varios campos cuando tiene más oportunidades de que la vida le escoja finalmente para alguna de esas disciplinas. En mi caso, fue a través de un concurso literario de Anaya cuando, muchos años después, descubrí que tenía madera de escritor y que quería dedicarme profesionalmente a esto.
¿Por qué decidiste narrar libros para niños?
Porque, para lo bueno y para lo malo, sigo siendo un niño: un niño muy lector. El seguir leyendo literatura infantil como adulto me ha permitido conectar mucho con el imaginario de l@s más pequeñ@s y sentir que puedo aportar nuevas historias que les diviertan y les emocionen. El mundo de los adultos lo encuentro cada día más incomprensible.
¿Es difícil escribir para un público infantil?
Depende del autor. Para mí, por lo que he comentado, resulta infinitamente más fácil escribir para niñ@s. El reto está en ofrecerles historias interesantes, con personajes verosímiles y bien construidos y narrativas que les emocionen, sin renunciar por ello a una estructura relativamente sencilla, y con una gramática que no les venga grande.
¿Cuáles son tus referentes literarios?
Aunque a veces trato de organizarme, confieso que soy un lector poco metódico. Desde el realismo mágico a la novela negra, pasando por el teatro del absurdo o la novela naturalista. Me entusiasman autores como Christopher Isherwood, Patricia Highsmith o Truman Capote, sin dejar de lado a españoles como Juan Marsé, Carmen Martín Gaite, o Eduardo Mendoza. En cuanto a los autores de literatura infantil, es obligado nombrar a Pilar Mateos, Juan Muñoz Martín, Mira Lobe, Carmen Vázquez Vigo, José Luis Olaizola, Gianni Rodari, Christine Nöstlinger, María Puncel… Sin olvidar al todopoderoso Roald Dahl.
A lo largo de tu trayectoria profesional has recibido numerosos reconocimientos. ¿Qué crees que te diferencia de otros autores de literatura infantil?
Los premios representan sin duda una ayuda moral (y económica) que me ha ayudado a que los demás (y yo mismo) empiecen a verme como un “escritor en serio”. Sin embargo, con reconocimientos o sin ellos, no creo que sea en esencia diferente de cualquier otro autor de literatura infantil. Cada uno tiene sus gustos particulares, sus herramientas y sus temas recurrentes. En mi caso, disfruto especialmente trabajando con el humor, la ternura, lo tenebroso, el lado fantástico y mágico de la vida cotidiana y con personajes peculiares que tienen problemas para encajar en la idea preconcebida de “normalidad”.
¿Cómo se te ocurrió la idea de esta saga?
Fue gracias a una editora de SM, Paloma Muiña, que me lanzó la propuesta de rescatar al personaje clásico de la Princesa (que sigue teniendo mucho éxito) pero modernizado y libre de prejuicios. Así surgieron estas tres aventureras que resuelven los problemas por sí mismas, que no son físicamente perfectas y que valoran la amistad por encima de todo. Esto, a su vez, me llevó a subvertir muchos otros aspectos de los cuentos clásicos y a traerlos a mi propio terreno (magos adolescentes tan famosos como youtubers, reyes divorciados, príncipes que rechazan luchar porque prefieren dibujar cómics…).
¿En qué se diferencia de otras sagas infantiles?
No puedo atribuirme el mérito de haber marcado una diferencia con ‘Princesas Dragón’, pues hay colecciones infantiles maravillosas que juegan con conceptos similares. Lo que sí puedo afirmar es que se trata de una saga protagonizada por princesas (y príncipes) fuertes e independientes que rechazan los estereotipos de género. Una colección vertebrada por el humor, el misterio, las aventuras y la magia, pero que, no por ello, renuncia a una narrativa interesante en la que los personajes evolucionan y se van descubriendo a sí mismos. Una particularidad de la saga que gusta especialmente es que cada uno de los volúmenes está narrado por una princesa distinta y, consecuentemente, con una voz diferente.
Las Princesas Dragón no son cursis ni están esperando en su castillo a que un príncipe las rescate. Con estas superheroínas medievales, ¿querías reivindicar el papel de la mujer en nuestra sociedad?
Absolutamente, pues en el fondo estas tres locas princesas no son más que futuras líderes de sus respectivos reinos. Además, quería crear unos personajes femeninos diferentes entre sí y que respondieran a los intereses y oportunidades de las niñas de hoy en día, que afortunadamente tienen ante sí un horizonte mucho más amplio de posibilidades vitales: por ejemplo, no tienen que vivir pendientes de sus vestidos ni de que las rescate un príncipe.
Los libros infantiles, ¿tienden a repetir los estereotipos sobre las mujeres?
No solo los libros, sino las películas, las canciones… y hasta nosotros mismos en la vida diaria. Estos estereotipos responden a prejuicios de género con los que llevamos conviviendo desde pequeños. Por eso las mujeres en las historias infantiles tienden a tener menos protagonismo, menos iniciativa, a desarrollar solo cierto tipo de oficios y a ser activas en las emociones y pasivas en la acción. Ahora tenemos la maravillosa oportunidad de revisitar esas ideas preconcebidas sobre los personajes femeninos y de cambiarlas al ritmo de las transformaciones sociales. Y viceversa.
Si tuvieras que convencer a un niño para que se lea esta saga, ¿qué le dirías?
De hecho ya he tenido que hacerlo. Simplemente les pido que superen ese resquemor hacia la palabra “Princesas” de la portada y lean dos o tres capítulos. Después el mayor problema ha sido despegarlos del libro. Ellos también aprecian una aventura plural de chicos y chicas donde el viejo modelo de princesa cursi y enamoradiza ha sido desterrado.
¿Habrá más libros de Princesas Dragón?
¡Sí! Aunque aún no me atrevo a adelantar cuántos serán exactamente (porque ni yo mismo lo sé), puedo asegurar que el sexto y el séptimo ya están en preparación… ¡Y tampoco serán los últimos!
Gracias por todo, Pedro. ¡Ha sido un placer conversar contigo!
Un comentario sobre “Pedro Mañas: «Princesas Dragón está protagonizada por princesas fuertes e independientes que rechazan los estereotipos de género»”